Apague el motor. Inspeccione la válvula de vacío (o la línea de barrido) en busca de daños. Si está dañada, sustitúyala. Si está obstruida o llena de contaminantes, compruebe los tubos del purificador previo, que deben estar libres de contaminantes. Si se obstruyen o se ve un exceso de contaminantes, será necesario limpiar los tubos del purificador previo.
Para limpiar los tubos del purificador previo, retire la cubierta de servicio de la carcasa y la válvula de vacío y deje el filtro instalado (para evitar que el polvo entre en la salida de inducción de aire). Utilice un volumen bajo de aire comprimido para soplar suavemente los tubos del separador. Puede dirigir el aire comprimido a través de ambos lados de los tubos Y desde el tubo de caída donde se acopla la válvula de vacío.
Si no dispone de aire comprimido o el uso de aire comprimido no fue efectivo debido a que se secó el contaminante dentro de la carcasa, retire el limpiador de aire de la máquina y cubra los tubos de entrada de aire para evitar que entre el contaminante. Retire los filtros primario y secundario y la válvula de vacío. Utilice agua a baja presión (por ejemplo, una manguera de jardín) para limpiar los tubos y el interior de la carcasa. Dirija el flujo de agua a través de los tubos del separador desde ambos extremos y repita el proceso según sea necesario para limpiar la carcasa. Pulverice el puerto de la válvula de vacío, alterando entre los tubos de entrada y los del separador. Asegúrese de que todos los servicios internos de la carcasa estén secos antes de volver a instalar los filtros, la válvula de aspiración y el filtro de aire en la máquina.